Una startup tecnológica irlandesa, Silicate, está experimentando con el uso de polvo de concreto en granjas para combatir el cambio climático. Silicate ha desarrollado una tecnología de ‘meteorización mejorada’ que tiene como objetivo eliminar permanentemente millones de toneladas de dióxido de carbono de la atmósfera. La empresa está a punto de realizar su primer ensayo en los Estados Unidos, donde esparcirá cientos de toneladas de concreto triturado en tierras de cultivo2.
La prueba consistirá en esparcir 500 toneladas de polvo de concreto sobre 50 hectáreas de tierras de cultivo, aproximadamente el equivalente a 120 campos de fútbol, en Chicago. Durante varios meses, el concreto triturado se descompondrá en el suelo, iniciando un proceso llamado ‘meteorización mejorada’. Este es una forma acelerada de un proceso natural llamado meteorización química, donde las rocas son erosionadas por la lluvia durante millones de años, secuestrando dióxido de carbono de la atmósfera y convirtiéndose en bicarbonato. El bicarbonato se lava en ríos y el mar, donde permanece almacenado en su forma disuelta o se bloquea en el lecho marino23.
Silicate ha optado por usar concreto en lugar de rocas, encontrando un nuevo uso para una de las formas de desecho más grandes del mundo. La empresa compra concreto sobrante de la construcción, lo pulveriza y luego lo esparce en tierras de cultivo de forma gratuita. Silicate mide cuánto carbono ha sido secuestrado y luego vende créditos de eliminación de carbono a grandes empresas y corporaciones para que puedan reducir su huella climática23.
«Creemos que nuestro enfoque de usar concreto devuelto para mejorar tanto la productividad como el potencial de eliminación de carbono de las tierras de cultivo podría ser revolucionario», dijo Maurice Bryson, CEO y cofundador de Silicate. «Es de bajo costo, es seguro aplicarlo a tierras agrícolas, y utiliza un material abundante que es fácil de obtener»23.
El primer ensayo podría secuestrar permanentemente hasta 100 toneladas de dióxido de carbono de la atmósfera y bloquearlo en los océanos del mundo durante decenas de miles de años, según la empresa. También se utilizará para probar si el material es efectivo en el Medio Oeste de Estados Unidos, donde las condiciones del suelo difieren de las de Irlanda, donde se encuentra la empresa. Silicate dice que ya ha visto resultados alentadores de los ensayos en su país de origen. La adición de polvo de concreto también puede mejorar la calidad del suelo y la productividad de los cultivos23.
Si los resultados del ensayo en los Estados Unidos resultan positivos, Silicate buscará expandir el proyecto en Illinois y el Medio Oeste. La empresa estima que el proceso tiene el potencial de eliminar entre 50 y 100 millones de toneladas de dióxido de carbono por año solo en el Medio Oeste de Estados Unidos, para comparar, un automóvil emite alrededor de 4.6 toneladas de dióxido de carbono anualmente2.
