Una explosión de cometa pudo haber iniciado la agricultura en Siria hace 12,800 años1. Antes del impacto del cometa, los registros muestran que los habitantes de la región consumían principalmente frutas silvestres, bayas y legumbres. Sin embargo, después del evento, su dieta cambió a granos y lentejas, resultado de una temprana experimentación en la agricultura1. La región también experimentó un aumento en los cultivos resistentes a la sequía, lo que refleja un cambio de un clima fresco a uno mucho más seco1.
La explosión del cometa ocurrió lo suficientemente cerca como para enviar calor masivo y vidrio fundido hasta el poblado de Abu Hureyra, en Siria2. Los habitantes de la zona comenzaron a cultivar cebada, trigo y legumbres, lo que indica un cambio significativo en sus prácticas agrícolas y alimentarias1.
En la actualidad, la agricultura en Siria sigue siendo un pilar fundamental para la población. Estados Unidos ha proporcionado semillas de alta calidad a los agricultores que cultivan trigo en el noreste de Siria para ayudar a alimentar a la población durante la crisis mundial de seguridad alimentaria3. La entrega de estas semillas ha permitido a los agricultores plantar aproximadamente 10,715 hectáreas de trigo y aumentar sus ingresos3. Además, al proporcionar nuevas variedades de semillas de alta calidad, se ha garantizado que los agricultores puedan cosechar semillas de mejor calidad para su siguiente temporada de siembra, lo que aumenta el acceso a alimentos asequibles3.
